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Barracas a precio de chabolas
El desprecio de las administraciones por este ejemplo de arquitectura autóctona valenciana se ha hecho evidente en el momento de realizar la valoración económica de estos inmuebles para compensar a sus propietarios por el desalojo.

Los peritos del Ministerio de Fomento “valoran las barracas como si se tratara de chabolas”.

Se da así la paradoja de que las barracas más antiguas y mejor conservadas –con elementos originales: techo de cañizo y senill, muros de adobe sin recubrir y estructura más antigua- podrían recibir indemnizaciones mucho menores que aquellas que sus propietarios han modernizado, haciéndoles perder su estructura original. En palabras de Gregori, los peritos del ministerio tienden a ver las centenarias barracas de la Punta como “viejas construcciones de barro y cañas” sin valor mayor que cualquier vieja chabola.



Tenemos, además, dos antecedentes recientes en los que tres barracas fueron derribadas por el Ayuntamiento de Valencia y la Universidad Politécnica siempre esgrimiendo la promesa de que serían reconstruidas en un futuro en otro emplazamiento (barracas de Burra junto a las cocheras de la EMT por el ayuntamiento y barraca del Frare en la UPV, ambas en 1998), promesas de las que jamás se ha vuelto a hablar.